¿Cómo conservar el café en casa?

El café verde es un producto delicado que se conserva mal. Una vez tostado, es todavía más frágil. Para conservar el café en casa y poder disfrutar de todos sus aromas en cada taza, deberéis adoptar algunos gestos simples, pero necesarios

¿Por qué es bueno conservar el café lo mejor posible?

El café, aunque es un producto que no tiene fecha de caducidad, es decir, que no se corre riesgo de acabar enfermo aunque lo consumamos 10 años después de ser cosechado, pierde sus cualidades organolépticas (aroma, sabor…) y nutricionales rápidamente.

Ya sea en grano o molido, los consejos para su conservación son exactamente los mismos. Sin embargo, es bueno saber que el café molido pierde sus cualidades más rápido que el café en grano, ya que la superficie de contacto con el aire es más extensa y la molienda disipa el CO₂, conservador natural del grano (su presión actúa como barrera contra el oxígeno)

¿En qué lugares se conserva mejor el café?

Como ya os hemos comentado mas arriba, el café es un producto delicado que requiere ciertas condiciones específicas para su correcta conservación y evitar que pierda sus cualidades y sabores. Los lugares más adecuados para conservar el café en óptimas condiciones son:

 El congelador

Al contrario que en el frigorífico, es interesante conservar nuestro café (paquete cerrado) durante más tiempo si lo congelamos, eso sí, una vez descongelado, perderá sus cualidades aún más rápido debido al fenómeno de microfisuras creadas por bajas temperaturas.

• Astucia: Si queréis conservar vuestros granos de especialidad sin perder sus cualidades durante más tiempo, os aconsejamos guardar dosis (la cantidad que soléis utilizar) previamente envasadas al vacío en el congelador. Cuando vayáis a realizar la preparación, moled los granos directamente congelados en vuestro molinillo y realizad la infusión.

En el mueble de la cocina

Es el lugar perfecto para guardar nuestro café, incluso si el paquete está abierto, ya que se encuentra en un lugar fresco, seco y sin luz. Si no podéis cerrar vuestro café herméticamente, os aconsejamos que lo guardéis en un recipiente hermético y si es posible al vacío.

El frigorífico (la nevera)

Al contrario de lo que puedan pensar muchas personas, no es nada bueno conservar el café en el frigorífico, tanto con el paquete cerrado como abierto. El café es poroso y corre el riesgo de absorber los olores de otros alimentos, además de la humedad que puede condensarse en el interior del paquete, dañando los granos o el café molido.

¿En qué tipos de paquetes se conserva mejor el café?

Los paquetes de café han ido evolucionando a lo largo del tiempo para garantizar su frescura el mayor tiempo posible.

Paquetes sellados en papel Kraft o multicapa

• Lo mejor: Son los más simples y los más baratos.
• Lo peor: Desprovistos de válvulas, no permiten que el café se desgasifique naturalmente. Conservación perfectible.

No podemos decir a ciencia cierta durante cuánto tiempo los granos conservan sus características en este tipo de paquetes.

Paquetes sellados herméticamente con válvula de liberación

Este tipo de paquetes es el utilizado por la mayoría de tostadores artesanos que se preocupan por mantener la frescura de su café.

• Lo mejor: Estupenda conservación del café. Se puede volver a cerrar.
• Lo peor: Precio elevado.

En estos paquetes se puede conservar el café durante 3 meses si se mantiene cerrado, una vez abierto, es conveniente utilizar el café en una semana aproximadamente.

Los contenedores bajo presión de nitrógeno

Estos “contenedores” son utilizados por tostadores importantes o industriales.

• Lo mejor: Una mejor conservación. El nitrógeno, gas neutro, sustituye al oxígeno responsable de la oxidación de los aceites. Contienen una válvula de desgasificación
• Lo peor: Importantes inversiones y logística para el tostador.

En estos contenedores es posible conservar el café durante meses.

Paquetes al vacío con o sin válvula

Este tipo de paquetes son principalmente utilizados por los industriales.

• Lo mejor: Conservación correcta del café
• Lo peor: Parte de los aromas volátiles son aspirados durante el proceso. No se puede volver a cerrarlo.

En estos paquetes podéis conservar el café hasta 3 meses si se mantiene cerrado, una vez abierto el café envejece rápidamente.

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